Ophiacodon con un anfibio en la boca
Los reptiles mamiferoides eran los amos del pérmico. Ophiacodon era un animal que vivía en pantanos y ríos en busca de peces o anfibios. Pesaba entre 35 y 50 kilos y podía medir 3,5 metros de largo. Contrariamente a Dimetrodon y Edaphosaurus, no tenía vela dorsal, aunque la carencia de esta era normal entre los pelicosaurios. Tenía otra manera de mantener la temperatura de su cuerpo, convertir rápidamente la comida en energía. Ophiacodon pudo ser el comienzo de los mamíferos. Su cráneo ya tenía forma alargada y los músculos de la mandíbula le ofrecían un gran poder de mordida. Los ojos se desplazaron un poco hacia el lado, de modo que su cráneo parecía aún mayor. En posición de espera en las orillas de los lagos, permanecía inmóvil durante cierto tiempo acechando a su presa. Metía cuidadosamente la cabeza en el agua y cúando pasaba un pez lo atrapaba a gran velocidad y luego se retiraba a devorarla tranquilamente. Sabía nadar aunque tambíen se deplazaba bien por tierra. Sus patas estaban debajo del cuerpo, así su movimiento reptante le permitía avanzar a gran velocidad.