Dimetrodon pertenece al grupo de los reptiles sinápsidos, más conocidos como reptiles mamiferoides. Vivió en el Pérmico inferior de Texas, Estados unidos. Era como un lagarto gigante que podía alcanzar los 3 metros de largo y tenía una gran cola. Tenía una gran cresta dorsal formada por apófisis vertebrales alargadas que usaba como arma intimidatoria, ya que medía más de 1 metro de altura. Esta cresta estaba recorrida por un montón de vasos sanguíneos, lo cual servía para regular la temperatura. Por la mañana, el Dimetrodon ponía su vela de cara al Sol para almacenar calor. Si un reptil de 250 kg (el peso aproximado del Dimetrodon) necesita tres horas para aumentar la temperatura corporal de 26 grados a 30 grados, el Dimetrodon, gracias a su cresta dorsal sólo tardaba 80 minutos. Este calentamiento rápido era muy útil para el Dimetrodon, ya quepodía comenzar la caza casi 2 horas antes que el resto de reptiles. Asimismo esta cresta también le servía para reducir su tempertura. Para refrescarse, el animal buscaba un lugar sombrío o ponía la vela de cara al viento para que el aire le quitara el calor del cuerpo. Se cree que la presencia de cresta estaba relacionada con la aparición de animales de sangre caliente en el Pérmico superior. El Dimetrodon se alimentaba de anfibios como el Diadectes, así como de otras especies de pelicosaurios. Pero una presa en particular, el Edaphosaurus, desarrolló una vela dorsal para poder escapar antes del Dimetrodon. Esta competencia de especies las encerró en un callejón sin salida evolutivo, pues seguramente su especialización acabó con ambos. El Dimetrodon vivía en las orillas de ríos y lagos y en los bosques de coníferas y helechos arbóreos.